Siete migrantes indocumentados empleados de Donald Trump, que trabajaban en campos de cultivo, fueron despedidos cuando culminó la cosecha de uva.
De acuerdo con The Washington Post, la compañía Trump Winery, con sede en Charlottesville, Virginia, despidió a los siete empleados migrantes, pero no lo hizo hasta que la cosecha acabara.
La empresa es administrada por Eric Trump, hijo del presidente.
“No tomaron esta decisión durante el verano porque nos necesitaban”, dijo Omar Miranda, uno de los siete empleados despedidos y quien trabajó diez años allí.
Los últimos tres meses del año son donde más abunda el trabajo, los campesinos llegan a trabajar por más de 60 horas en la semana. También hacen jornadas nocturnas para cosechar la uva y poder sacar el vino. Sin embargo, en invierno el trabajo disminuye.
Después de varios años de trabajo y a pesar de que los administradores sabían el estatus de los migrantes indocumentados, los empleados de Winery Trump no habían tenido ningún problema.
“Donald Trump sabía de estos trabajadores desde hace meses”, dijo Aníbal Romero, abogado de los trabajadores
“pero esperó a que los campos estuvieran cultivados, consechados y que se hiciera el vino, luego los desechó como una bolsa de papel usada. Feliz Año Nuevo, están despedidos”.
Por su parte, la Organización Trump argumentó que los trabajadores que utilizan una identificación falsa para conseguir empleo. Sin embargo, no aclara cómo se enteraron del estatus migratorio de los siete trabajadores al mismo tiempo y justo al terminar la temporada de consecha.
El despido de estos trabajadores coincide con lo ocurrido hace un año, donde otras empresas de Trump hicieran lo mismo al revelarse tenían a indocumentados en su nómina.
Con información de La Opinión