Abuelos de Patrick Crucius, quien asesinó a más de 20 personas en El Paso, Texas, dieron detalles de su vida

“Estamos devastados (…) y rezamos por las víctimas de la tragedia”, dijeron a través de un comunicado, Larry y Cinthya Brown, los abuelos de Patrick Wood Crucius, quien asesinó a 20 personas en el tiroteo de un centro comercial en El Paso, Texas.

El comunicado fue leído por un amigo en las puertas del hogar de Larry y Cinthya.

“Patrick Crusius es nuestro nieto, vivía en nuestra casa. Se mudó a otro sitio hace seis semanas, y ha pasado aquí algunas noches mientras estábamos fuera de la ciudad”, mencionaron ambos en el comunicado.

“Su licencia de manejar y su correo están domiciliados en nuestra casa en Allen. Esa conexión nos ha puesto en el foco de los medios de comunicación, por su puesto. Estamos hablando sólo con las agencias de la ley, y no haremos más declaraciones a los medios, a los que pedimos respeten nuestra privacidad”, concluyeron.

El FBI investiga si el tiroteo, que dejó dos docenas de heridos, pudo constituir en un crimen de odio, puesto que aparentemente el joven publicó poco antes en redes sociales un texto con soflamas contra los migrantes, particularmente contra los latinos.

Crucius

se rindió ante la policía sin ofrecer resistencia, quien ahora se encuentra en prisión, sin la posibilidad de fianza, a la espera de un juicio. El fiscal Jaime Esparza ha avanzado, pues solicitará la pena de muerte.

Un compañero de clase llamado Jacob Wilson, en una declaración para la cadena NBC dijo que Crucius se graduó de la escuela secundaria de Plano en 2017. “Era muy introvertido”, mencionó . Acudió luego a Collin College

, donde tomó clases hasta esta primavera.

El Departamento de Policía de Allen sólo tiene registrados tres incidentes de Crucius: uno en 2014, donde se reportó que había escapado pero regresó a casa media hora después; en 2016 estaba en un autobús escolar que resultó accidentado sin consecuencias; y el pasado mes de marzo llamó al teléfono 911 de emergencias para reportar una falsa alarma en casa de sus abuelos.

El texto que supuestamente publicó antes de la matanza alaba el tiroteo en una mezquita de Christchurch, en Nueva Zelanda, en marzo; y achacó sus propias acciones a una supuesta “invasión hispana” en Texas, culpando a los latinos de “instigar” la balacera.

Con información de Telemundo.