Entre el 2000 y el 2011 el Servicio de inmigración y Control de Aduanas (ICE) y la Policía trabajaron de forma conjunta para sacar a unos 320 mil estudiantes latinos de sus escuelas, impidiéndoles continuar con sus estudios.
De acuerdo con el informe presentado este martes por la Asociación Estadounidense de Investigación Educativa, la mayoría de los estudiantes provenían de la escuela primaria y posiblemente muchos de ellos eran ciudadanos de los Estados Unidos.
Una de las consecuencias de estas acciones fue que el número de estudiantes latinos bajó un 10%.
En esta misma fecha, fueron identificados 55 condados que trabajaron junto a ICE para identificar, arrestar y deportar migrantes sin documentos, esto según cifras del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Por su parte Thomas Dee, profesor de la universidad de Stanford dijo que estás acciones tienen consecuencias no solo a la comunidad migrantes, también a la economía local, pues fueron menos los profesores contratados, debido a los miles de estudiantes que ya no asistían a las escuelas.
Según Mark Murphy, coautor del informe, aclaró que esta política no es propia del presidente Donald Trump, pues algunos expresidentes también la apoyan como George W. Bush y Barack Obama.
Con información de Telemundo