El equipo de Médico Sin Fronteras asegura que el 90% de los pacientes que ha atendido ha sufrido algún tipo de tortura psicológica y física.
Tras casi tres meses de atender las necesidades humanitarias de los migrantes en la ciudad fronteriza de Tijuana, la organización médico-humanitaria asegura que la crisis humanitaria de migrantes y refugiados centroamericanos podría alcanzar aún mayores proporciones.
Según un informe oficial de la organización, los casos de violencia sexual, infecciones respiratorias, enfermedades diarreicas, enfermedades crónicas y algunos casos de estrés post-traumático, son algunas de las problemáticas que los médicos han encontrado en un gran número de pacientes migrantes.
Atención en salud mental, una de las principales necesidades
Una de las principales necesidades detectadas por los equipos de MSF ha sido la atención en la salud mental, la cual, en este último tramo del viaje se encuentra considerablemente deteriorada y desentendida.
“Considerando las situaciones de violencia que estas personas han vivido en su país de origen, encontramos síntomas como ansiedad, estrés agudo y algunos casos de estrés post-traumático, que se ven agudizados por el entorno, las condiciones de hacinamiento y la falta de sueño”, señaló Alberto Macín, psicólogo mexicano de MSF, que brinda asistencia a en la zona.
“9 de cada 10 pacientes atendidos por nuestros equipos ha sufrido algún tipo de tortura psicológica y física”, apunta Macín. A esto se le suma el miedo y la ansiedad que tienen de ser detenidos, separados de sus familiares o retornados a sus países donde sus vidas peligran.
Controlar los riesgos y atender las inclemencias del tiempo
Cuello de Botella
Médicos Sin Fronteras es una organización de carácter internacional que aporta su ayuda a poblaciones en situación precaria y a víctimas de catástrofes de origen natural o humano y de conflictos armados, sin ninguna discriminación por raza, religión o ideología política.
Con información de Médicos Sin Frontera.
