Miembros de la bancada hispana del Congreso exigieron el martes investigar la atención brindada por los agentes federales a una niña guatemalteca de siete años que murió bajo custodia de la Patrulla Fronteriza.
Los legisladores hicieron sus declaraciones afuera de la estación de la Patrulla Fronteriza en Lordsburg, Nuevo México.
Jakelin Caal y su padre fueron detenidos el 6 de diciembre en el puerto de ingreso de Antelope Wells, ubicado en una región rural de Nuevo México. La niña comenzó a vomitar y posteriormente dejó de respirar durante el trayecto a Lordsburg.
El representante federal Raul Ruiz, demócrata y médico de profesión, cuestionó si la Patrulla Fronteriza debió solicitar un traslado aéreo tan pronto como el padre de la menor reportó la situación.
Eventualmente, Caal fue transportada en helicóptero a un hospital de El Paso, Texas, donde murió horas más tarde.
También el martes, las autoridades guatemaltecas informaron que se concluyeron los trámites necesarios para repatriar el cadáver de Caal.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Marta Larra dijo que prevén que los restos lleguen a Guatemala el jueves y luego sean trasladados a su pueblo natal, San Antonio Secortez.
