Esta semana, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) envió a una pequeña de cuatro años de vuelta a su país de origen tras pasar seis meses detenida sin notificar a su padre.
De acuerdo con medios locales, el papá de la menor fue informado las autoridades estadounidenses tan solo media hora antes de que el avión llegara a su destino, Guatemala.
Tras llegar a su país de origen, la niña tuvo que dormir una noche en un refugio gubernamental completamente sola, pues no hubo un adulto que la recogiera, ya que su papá vive a 8 horas del aeropuerto.
Entrevistada por Huffington Post, Lisa Fryndman, directora de políticas e iniciativas de Kids In Need of Defense (KIND), comentó lo siguiente: “Imagina a esta niña de 4 años, volviendo a casa después de meses y meses de separación… para que su padre no llegue después de tanto tiempo. El nivel de trauma es inimaginable”.
Al respecto, la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) denunció que hay más casos similares cometidos por la migra estadounidense.
La abogada Lee Gelernt declaró existen serias preocupación por cómo ICE se está comunicando con las ONG sobre el terreno en América Central: “El gobierno a menudo no toma ni los más mínimos pasos para garantizar que la reunificación se realice sin infligir daño emocional adicional a las familias”, comentó.
Según varios miembros de la ACLU, se han contactado a los padres de los casi 219 niños que siguen en la Oficina de Reasentamiento de Refugiados y comentan que los padres tienen que elegir entre la seguridad de un niño y la separación permanente, dicen que aproximadamente un tercio ha optado por enviar a sus hijos a casa.
Este caso fue investigado por la anteriormente mencionada Fryndman, quien se encargó de monitorear el regreso de la niña y la manera en la que opera ICE.
