Durante una audiencia judicial, el gobierno de Donald Trump informó que 463 padres y madres de menores de edad fueron deportados sin sus hijos, como parte de la campaña Cero Tolerancia.
De acuerdo con The Washington Post, estos casos están en revisión, lo que significa que la lista no está cerrada a otros migrantes deportados mientras sus hijos están en refugios del gobierno federal.
En la audiencia, los abogados del gobierno informaron que 879 padres se han reunido ya con sus hijos, y otros 538 están a punto de reunirse y sólo esperan arreglar temas de transporte.
La audiencia ante el juez Dana M. Sabraw reveló que muchos de los padres deportados fueron presionados a firmar salidas voluntarias, con tal de ser liberados de los centros de atención.
En algunos casos, los padres prefirieron dejar a los niños en Estados Unidos con algún familiar, para seguir ellos su proceso desde la frontera.
El próximo jueves es la fecha para que la administración Trump informe qué paso con la orden del juez de reunificar a las familias separadas.
El abogado de ACLU, Stephen Kang dijo que la audiencia pareciera ser el primer esfuerzo del gobierno, aunque aún impreciso, por medir el tamaño del problema.
Si los números resultan ser más que los que el reporte sugiere, esto será un gran tema para nosotros. Tenemos muchas preguntas”, dijo Kang.
Las decisiones del juez
Además de ordenar la reunificación de familias, el juez Dana M. Sabraw le pidió al gobierno federal aclarar cuántos de los más de 2,500 padres y madres elegibles para reunirse con sus hijos ya no están en el país. También frenó las deportaciones de familias que no han sido reunificadas.
