El gobierno encabezado por el presidente Donald Trump externó su apoyo a la propuesta realizada por el representante por Texas Ted Poe, quien propuso cobrar un impuesto del uno por ciento a las remesas que los migrantes envían a sus países de origen.
La propuesta fue planteada por Poe este miércoles, durante una audiencia del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara.
En específico, Ted Poe puso como ejemplo los 28.1 mil millones de dólares que recibe México cada año desde Estados Unidos.
“¿No deberían los Estados Unidos cobrar una tarifa, del uno por ciento, para que estas transacciones ocurran?”, sostuvo el representante, quien añadió que los trabajadores extranjeros envían dinero a países como México cada año y que a través de un impuesto como este se asegurarían que parte del dinero generado en EU permanezca en el país.
Además, sostuvo que estas personas no notarían la diferencia de los 138 mil millones, pues es una pequeña tarifa.
En respuesta, el Secretario de Estado Adjunto en funciones del Departamento de Estado para el Hemisferio Occidental, Kenneth Merten, respondió de manera positiva y aseguró que es objeto de legislación si se decide ir por esa ruta.
La imposición de un impuesto a las remesas que los paisanos envían a México no es nada nuevo, primero fue propuesto por Trump durante su campaña, aunque dejó de ser mencionado por la Casa Blanca.
Un mes después de la toma de posesión del Mandatario, el presidente del Subcomité de Seguridad del Transporte de la Cámara de Representantes, Mike Rogers, anunció una iniciativa de ley para gravar las remesas con un impuesto de 2 por ciento para pagar el muro en la frontera con México, pero el plan nunca avanzó en el Congreso.
