La mañana del día de Acción de Gracias estuvo a punto de ser trágica para los integrantes de esta familia en Kendall, Florida, ya que estuvieron en grave peligro y tuvieron que ser hospitalizados por un descuido al cocinar tamales.
De acuerdo con los reportes, la noche del miércoles antes de ir a dormir olvidaron apagar una hornilla y al parecer aspiraron monóxido de carbono durante varias horas.
Durante la noche, la combustión de sustancias tóxicas, como el gas, les provocó afectaciones respiratorias, incluso 4 de los 7 integrantes de la familia tuvieron que ser trasladadas a hospitales del área, mientras que el resto fue atendido en el lugar.
“Cuando las unidades llegaron, ellos informaron que varias personas en el apartamento no se sentían bien y notaron que tenían una gran freidora conectada a un tanque de gas dentro del departamento”, dijo el jefe de bomberos de Miami-Dade, Kevin Martin.
Y es que, la exposición al monóxido de carbono causa diversas afectaciones como dolores de cabeza, mareos, vómito, confusión, perdida potencial de la conciencia, daño cerebral y eventualmente la muerte.
El envenenamiento por monóxido de carbono es especialmente peligroso para víctimas que están durmiendo.
La unidad de materiales peligrosos trajo ventiladores para bombear aire fresco y dispersar el monóxido de carbono. Los pisos superiores del edificio fueron evacuados.
Afortunadamente, no hubo víctimas mortales y esta familia solo se llevó el susto de su vida.