Cada vez aumenta más la incertidumbre por una nueva ley del gobierno de Donald Trump, la deportación express, la cual pondría en riesgo a cientos de miles de inmigrantes indocumentados.
Esta iniciativa, de la época del presidente Bill Clinton, permitiría a los agentes migratorios actuar como jueces, sin embargo hasta el momento ha sido ocupada en muy pocas ocasiones.
De acuerdo con Telemundo, con esta ley el gobierno tiene el poder para deportar de forma rápida a las personas que recién ingresan, están a determinada distancia de la frontera o que recién ingresan a Estados Unidos.
La medida originalmente era aplicada con criminales convictos y con personas que podían comprobar estar más de dos semanas en el país.
Por lo que las autoridades migratorias estarían facultadas para negar a los indocumentados el derecho a comparecer ante un tribunal migratorio.
Abogados denuncian que esta propuesta rosa la inconstitucionalidad, ya que a ninguna persona se le puede condenar de alguna falta si primero no acude ante un juez.
Por su parte, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) confirmó a Univisión que analiza aplicar esta política a nivel nacional, lo cual aumentaría la disposición actual, solo aplica a indocumentados que se encuentran a no más de 100 millas de la frontera.
Activistas y grupos pro inmigrantes denuncian que al implementar la medida sin la cláusula de cercanía a la frontera, permitiría a las autoridades migratorias acechar a indocumentados en todo el país, obligándoles a comprobar que llevan en el país más de 3 meses, algo que muchos indocumentados no podrán hacer, quedando listos para una deportación expedita.
Se sospecha que la aplicación de esta drástica medida es una respuesta directa del presidente Trump ante las presiones emitidas por los sectores más radicales de su partido, quienes opinan que ha sido muy suave con los indocumentados.
