El día de ayer a la media noche finalizó el plazo establecido por el gobierno de los Estados Unidos para renovar el plan migratorio DACA y lo hizo entre presiones de diferentes organizaciones civiles y algunos políticos para darles seguridad a los migrantes con un Dream Act “limpio”.
El primer embate contra el presidente de EU, Donald Trump, un día después de que el Fiscal General, Jeff Sessions, anunciara el final del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).
A un mes de haber realizado el anuncio, la administración federal estadunidense acumula un total de seis demandas, siendo la última interpuesta la víspera por la organización de defensa de los migrantes Casa Maryland, quién sostiene que el fin del programa fue motivado por un ánimo racista del presidente.
Por su parte un grupo de 38 senadores demócratas pidieron al presidente Trump una prorroga en el programa DACA. Sostienen que los desastres naturales alteraron las actividades cotidianas y dificultaron que los beneficiarios renueven sus documentos.
Del mismo modo dreamers y activistas intensificaron sus protestas para exigir la aprobación de un Dream Act limpio y no una medida temporal.
La demanda es simple, aprobar una ley libre de condiciones o sujeta a negociaciones políticas, que no use a la juventud migrante para atacar a sus padres y a las comunidades fronterizas con detenciones y deportaciones.
Desde la semana pasada distintos grupos pro migrantes como como United We Dream, We Belong Togheter, California Dream Network, Undocumedia y CHIRLA (Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes) realizaron diferentes acciones y movilizaciones para promover la legalización permanente de los jóvenes protegidos por DACA.
We believe that we will win! Thanks to all the DREAMers, undocumented folks, & allies fighting for a #CleanDreamAct! #HeretoStay pic.twitter.com/jCqFZ7X0SR
— APALA (@APALAnational) 5 de octubre de 2017
Uno de los puntos más álgidos de la protesta inició el día de ayer, cuando dreamers, líderes demócratas del Congreso y sindicalistas protestaron en diversos puntos del país, incluido el Capitolio, aumentaron la presión sobre los legisladores aprobar una medida antes del 9 de diciembre.
In Spanish, Rep. Gutiérrez says he doesn’t want gov’t shutdown but Congress needs to step up on Dec 9th pic.twitter.com/N94Z2Ndk8u
— Maria Pena (@mariauxpen) 5 de octubre de 2017
En el mismo orden grupos latinos de Florida y Texas, dos estados clave para la reconfiguración del Congreso en 2018, expresaron su apoyo por una reforma para legalizar a los indocumentados y su rechazo por la anulación de DACA y la construcción del muro fronterizo.
(New Poll: 89% of Texas Latinos Want Dream Act Passed; Oppose SB4) – https://t.co/HPOnT0q2Fh pic.twitter.com/83xfCrdKHC
— Latino Decisions (@LatinoDecisions) 4 de octubre de 2017
This is a very important chart about the Latino vote in 2018, how DREAM Act will greatly influence Florida Latino vote pic.twitter.com/d48tCdZ9JC
— Latino Decisions (@LatinoDecisions) 4 de octubre de 2017
SIN TIEMPO
De acuerdo con la Oficina de Ciudadanía y Asuntos Migratorios (USCIS), hasta la noche del miércoles habían recibido 118 mil solicitudes de renovación, de un total de 154 mil, dejando a un total de 36 mil pendientes.
Cabe señalar que los dreamers que tienen DACA y cuyos permisos expiran después del 5 de marzo de 2018 solo podrán seguir trabajando hasta que esos permisos terminen. Los beneficiarios de DACA irían perdiendo su protección progresivamente a partir de marzo.
De acuerdo con Sarah Sanders, portavoz de Donald Trump, la próxima semana el presidente presentará su plan para una reforma migratoria responsable.