En menos de una semana 9 migrantes fueron rescatados por la Patrulla Fronteriza, luego de que los llamados “polleros” los abandonaran a su suerte.
El martes, agentes encontraron un sujeto inconsciente cerca de Rio Grande City, Texas; el hombre, afectado por un golpe de calor, fue trasladado a un hospital en Edinburg.
Una llamada alertó, 48 horas después, a la estación de fronteriza de Falfurrias. La historia tuvo un final similar, sólo que esa ocasión dos personas fueron rescatadas.
El viernes, agentes de McAllen auxiliaron a un grupo de seis extranjeros ilegales cerca de Madero, Texas. Los policías se percataron de la situación cuando observaron a un sujeto que estaba experimentando dificultades para mantenerse a flote en el Río Grande.
De acuerdo con un comunicado de la Patrulla Fronteriza, los agentes le lanzaron una cuerda de rescate para ayudarlo a flotar.
Ese mismo día, en Falfurrias, se recibieron dos llamadas separadas de la Oficina del Sheriff del Condado de Kenedy y un empleado del rancho local, reportaban a cuatro extraviados. Miembros de la Border Patrol, junto con otros elementos de seguridad, los localizaron, luego fueron trasladarlos a un hospital en Corpus Christi.
El sábado la situación se repitió, una persona fue encontrada en situación de peligro en el condado de Brooks.