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Mexicano de 8 años, víctima del tiroteo en San Bernardino, California

Mexicano de 8 años, víctima del tiroteo en San Bernardino, California

Jonathan Martínez, un pequeñito de ocho años de edad, fue una de las víctimas mortales del tiroteo en la escuela primaria North Park, en San Bernardino, California, el pasado martes 10 de abril.

La Secretaria de Relaciones Exteriores confirmó que Jonathan Martínez tenía nacionalidad mexicana, por lo que el Consulado de México en San Bernardino ya se puso en contacto directo con los padres del menor y les está brindando toda la asistencia y protección necesarias.

En el lugar también murió la maestra de Jonathan, Karen Elaine Smith, de 53 años. 

Ambos fueron asesinados a balazos por Cedric Anderson, esposo de la maestra, quien se disparó a sí mismo después de quitarle la vida a su mujer y a Jonathan.

Ataque

Según reporta Univisión, el tiroteo ocurrió en un salón para niños con necesidades especiales de la primaria North Park. La clase tenía a estudiantes de los grados primero al cuarto. Durante el incidente en el salón había 15 niños, una maestra y dos asistentes adultos.

El asesino, Cedric Anderson, entró a la primaria como visitante, argumentando que iba a entregarle un objeto a su esposa, dijo el jefe de policía de San Bernardino, Jarrod Burguan, durante una conferencia de prensa este martes.

Una vez en el salón, Anderson sacó un revolver Smith & Wesson y disparó en diez ocasiones. Los tiros alcanzaron a su esposa y a Jonathan Martínez, quien sufría de Síndrome de Williams (un trastorno genético que causa problemas cardiovasculares y psicológicos).

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En el tiroteo resultó herido otro alumno de 9 años, que aún no ha sido identificado. El menor permanece internado en un hospital y “está en condición estable, está mejorando”, señaló Burguan.

Antecedentes

Cedric Anderson era un hombre desempleado que vivía en Riverside. Había trabajado en el área de mantenimiento y trataba de abrir su propio negocio. En un momento de su vida fue miembro del Ejército (según sus familiares) y pastor en una iglesia en Las Vegas, Nevada. Era padre de tres adultos.

Anderson también tenía un pasado de incidentes relacionados con armas y violencia. Había sido arrestado en cuatro ocasiones entre 1982 a 2013 por armas, violencia doméstica y robo. En ninguno de esos casos fue convicto. Los detectives descubrieron que el arma que usó en el tiroteo fue originalmente vendida en 1979 en el estado de Michigan.

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