Luego de pasar casi dos años en un centro de detención de inmigrantes en Wisconsin; el viernes Francisco Morales de 26 años salió bajo fianza y sorprendió a su mamá en el Día de las Madres.
“Pensé que regresaría el lunes, eso es lo que me dijo. Estaba tan emocionado de abrazarlo. Era muy difícil no saber cómo estaba, cómo lo trataban, si estaba comiendo o no. Este es el mejor regalo que una madre podría pedir”, dijo Adriana Torres, quien tiene 46 años y es mamá de Francisco.
Morales solicitó asilo un par de veces; sin embargo, los fiscales del gobierno apelaron ambos fallos. Cuando las apelaciones se abrieron paso por los tribunales, las autoridades de inmigración no quisieron liberar a Morales.
Por lo que el mes pasado, los abogados de Morales demandaron su libertad en un tribunal federal. Ellos ganaron.
“Todavía me parece irreal que haya vuelto. Sólo me golpeó una vez que vi el horizonte desde la carretera. Fue entonces cuando sentí que mi corazón latía”, dijo Morales.
Arianna Salgado, miembro de Comunidades organizadas contra las deportaciones (grupo activista en Chicago), recogió a Francisco de la cárcel del condado de Dodge. El grupo publicó su bono de mil 500 dólares.
“Le trajimos una muda de ropa y una máscara. Durante el viaje en automóvil escuchamos todas sus canciones favoritas. Se puso al día con todos sus artistas favoritos que lanzaron música mientras estaba dentro”, compartió Arianna Salgado.
¿Cómo se siente este hombre liberado que sorprendió a su mamá?
Francisco Morales nació en México. En 2017, con solamente 13 años y sin la debida autorización viajó a Estados Unidos. En septiembre de 2018, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas detuvo a Morales y lo colocó en un proceso de deportación.
En abril de 2019, un juez de inmigración otorgó asilo a Morales, ya que tiene ansiedad y depresión severas, entre otras enfermedades.
Los fiscales del gobierno apelaron ambos fallos, que aún siguen pendientes. Keren Zwick, un abogado del Centro Nacional de Justicia para Inmigrantes que representa a Morales, dijo que Francisco “estará en el mundo mientras se resuelva su caso”.
“Tengo pesadillas sobre ser detenido. Son sobre ICE viniendo detrás de mí”, dijo Morales después de estar fuera por tres días.
Sin embargo, Francisco está listo para disfrutar de su libertad.
“Es extraño pensar que durante casi dos años de mi vida estuve detenido deseando poder abrazar a mi madre o poder ayudar a mi hermano con su tarea. Me lleva un minuto darme cuenta de que puedo, que finalmente volveré a ser parte de mi familia”, dijo.
