Cuatro activistas de Estados Unidos enfrentan cargos por colocar botellas de agua en la frontera México-Estados Unidos, para los migrantes que intentan cruzar la frontera y luchar por sus vidas.
El juicio en contra de los miembros del grupo No Más Muertes, comenzó el martes pasado por colocar galones de agua dentro del Refugio Nacional de Vida Salvaje de Cabeza Prieta, la cual se encuentra en el desierto de Sonora, en el suroeste de Arizona.
En total fueron nueve activistas involucrados en la acción humanitaria, pero solamente cuatro mujeres fueron procesadas.
El caso ha generado controversia. El abogado defensor asegura que los cuatro ciudadanos americanos son víctimas de un sistema que está diseñados para que los migrantes sufran de los extremos calores del desierto al intentar esconderse de las autoridades migratorias.
El grupo humanitario No Más Muertes es una organización humanitaria dedicados principalmente a promocionar los esfuerzos a poner un fin a las muertes de migrantes en el desierto.
El juicio comenzó en Tucson, Arizona el martes pasado. Los cargos contra Hoffman, Madeline Huse, Oona Holcomb y Zaachila Orozco McCormick son por ingresar a un refugio nacional de vida silvestre sin un permiso y de abandonar la propiedad allí.
Desde 2017, la oficina del médico forense del condado donde se encuentra el Refugio, asegura que se han encontrado 43 cadáveres de migrantes deshidratados en el área en tan solo dos años.
Aún no se sabe el destino de éstas cuatro mujeres, pero se espera que el fin de semana el veredicto del juez salga a la luz.
