Cada día miles de personas dejan sus hogares con la esperanza de salir adelante junto a sus familias, además de tener que decir adiós a todo su mundo, tienen que enfrentar múltiples peligros sin ninguna certeza de lo que pasará y con su fe como único escudo.
Este es el caso de Malena Molina, una paisana originaria de Michoacán quien tuvo que decir adiós a su hija cuando partió hacia Estados Unidos en búsqueda del sueño americano y narró a Conexión Migrante cómo fue que San Judas Tadeo intercedió por ella.
Malena nos contó que su hija había intentado llegar a Estados Unidos en repetidas ocasiones, sin embargo, por una u otra razón en ninguna oportunidad logró su objetivo.
Desesperada, Malena decidió ir a la iglesia para pedirle a San Judas Tadeo que ayudara a su hija a cumplir su sueño.
Al siguiente día, nada más despertar, Malena se llenó de alegría, pues su hija finalmente había logrado llegar al país vecino y se encontraba muy bien.
Tras el milagro, Malena agradeció a San Judas por escuchar sus plegarias.
“Doy gracias a San Juditas por todo, sigo pidiéndole y poniendo a mi familia en sus manos”, es como Malena terminó su relato.
San Judas Tadeo es uno de los 12 apóstoles de Jesús, es presentado en los Evangelios como patrono de las causas imposibles y los desesperados.
En sus Revelaciones, Santa Brígida cuenta que el Señor Jesús la exhorta a que cuando necesitara conseguir ciertos favores los pidiera por medio de este apóstol.
Es por ello que la devoción a San Judas Tadeo es muy grande dentro de la piedad popular, a causa de los numerosos favores que por su intercesión le son concedidos a quienes le rezan con fe.
La Arquidiócesis explicó que “por todos es sabido que muchas personas que delinquen consideran a San Judas como su santo patrono”, y aclara que este santo “de ningún modo se vería en el cielo intercediendo ante Dios a favor de quienes actúan en forma contraria a los mandamientos de Cristo, entre ellos, violentando los preceptos de No Matarás, No robarás, No cometerás adulterio”.
Paisano, si tu también tienes una historia de fe y esperanza que contarnos, envíala en audio, video o texto a través de nuestro Facebook o correo electrónico (redacció[email protected]).
